Un joven con
todas las ganas de vivir, alegre y extrovertido por naturaleza, con un inicio
de vida diferente y unas circunstancias que marcarán su devenir por el camino
de la vida.
Alejado
desde pequeño de la posibilidad de tener unos padres como todo el mundo y en lo
normal que se debe acontecer, él es precedido por una situación adversa que le
impide disfrutar de su propia familia tal y como se merece.
Sus abuelos
se hacen cargo de la inyección de vida para este pequeño y prometedor ruiseñor
en sus futuros días. Así es como se desarrolla su infancia y adolescencia,
entre amigos de toda la vida (que aún están a su lado), su deporte favorito, su
amigo el balón y sus “hermanos adoptivos” (amigos/hermanos).
Transcurre
día a día con su inseparable sonrisa y sus ganas de hacer feliz al mundo
entero, se pasea por el camino de los desvíos y pronto la vida le muestra su
cara más dura.
Se enamora
de un ángel sevillano que le da “to el sentío”, su amiga, su pareja, su amante,
su confidente, en definitiva, su sombra en la luz y su luz en su sombra.
Fruto de esa
fusión empieza a gestarse la llegada al mundo de su retoño. Estando en Sevilla
y con 8 meses de gestación, de repente y viendo un paso de Semana Santa, a Dani
se le va la visión intermitentemente, con lo cual su regreso a la capital fue
inminente. Una vez allí, la resonancia que le hicieron les dio la peor noticia
que nunca esperaban. Ingresado de urgencia en la planta de terminales, entró en
fase de desesperación y allí nadie le daba una explicación de qué tenía.
Muestra de su estado y ansiedad se encuentra de cara con la verdad. El
resultado era un tumor en la cabeza que oprimía el nervio óptico, al día
siguiente fue intervenido por un cuerpo médico que pocas esperanzas le daban de
continuar.
Ya en el
proceso de recuperación notó unas mejorías que hacían pensar que todo iba por
buen camino, a eso le añadimos la grandeza de que la vida le permitió estar al
lado de su mujer y ver nacer a su hija. Tras el nacimiento empieza de nuevo su
calvario, en lo que creía haber pasado el susto se convirtió en una batalla
cuerpo a cuerpo. Vuelve a entrar en quirófano y por fin se establece la
normalidad dentro de su situación, la ingestión de los medicamentos
correspondientes hacen que Dani pase de a tener 45 kg de más. Todo esto provoca
una depresión que le impide salir, disfrutar y reír. Ni siquiera la presencia
de su mujer y de su hija le anima a encontrar su verdadero yo. Tras el
primer año de vida de su hija y él no querer cogerla por miedo a hacerla daño o
que se le cayera (producto de su invidencia) y gracias al consejo de una
psicóloga profesional del grupo O.N.C.E. y al incondicional apoyo de su mujer
que tiró de su interior y de su fuerza para sacar a su marido y a su hija del
pozo donde se veían, fue cuando Dani empezó lo que hoy es un verdadero ejemplo
de superación.
"Cuando uno nace Héroe, es capaz de iluminar cualquier sombra"
Hoy día este
Héroe de carne y hueso, con su invidencia, su mujer, su hija y toda la familia
y amigos que tiene al lado, ha conseguido establecer una forma de vida y una
forma de entender cómo aprovechar cada minuto que dispone para ser feliz.
Este campeón
nos ha dado una lección a todos, ¿quién iba a pensar que él va a disputar un
triatlon? ¿quién iba a pensar que él iba a salir a correr, nadar y sufrir con
su limitación? Pues he aquí la prueba de nuestro gran campeón. Se lo prepara,
lo entrena y gracias a Navalcarnero al Límite y en particular deportivamente
hablando a su Personal Trainner Marta Gonzalez, un atleta lo suficientemente
grande que sólo es superada por su propia calidad humana.
Les pregunto al uno por el otro y al otro por el uno:
AB: Dani
¿qué es Marta para ti?
DQ: “Marta
es parte de mi luz día a día”
AB: Marta,
¿Quién es Dani?
MG: “Un
luchador sin barreras”
Su Victoria en su Bernabeu
Desde aquí
quiero decir que me siento muy orgulloso de ser su amigo, pero no ahora sólo,
soy amigo suyo de toda la vida, hemos compartido canchas de futbol sala, de
futbol 11, salidas de fiesta, capeas, cumpleaños, peña y fiestas patronales.
Pero por encima de todo, hemos sido, somos y seremos aquí o allí, da igual, amigos siempre. Al
Gran Dani Quero no lo perderé nunca, porque lo vale, porque lo necesito y
porque aporta valores humanos y calidad personal a mi vida. Es de las personas
que hace grandes a los que estamos a su lado.
Gracias por
estar en mi vida.
No hay comentarios:
Publicar un comentario